2011/09/08

El aspecto de la piel del recién nacido es índice de su salud

La piel del recién nacido suele conservar restos del vérnix caseoso, que servía de protección al feto durante el embarazo, y de lanugo, un tipo de vello que desaparece al poco tiempo de nacer. Ciertos tonos en la piel del bebé pueden ser índice de problemas de salud, como la ictericia, si la piel presenta un tono amarillento, o alguna cardiopatía, si este es azulado.

La piel del bebé recién nacido suele ser fina y suave. Nada más nacer todavía tiene algunos pegotes de una grasa especial que le protege dentro del líquido amniótico, el vérnix caseoso.

La piel del bebé puede estar recubierta por algo de vello, que puede ser largo en algunas partes del cuerpo como los hombros y la espalda. Es el lanugo, el vello que recubría al feto durante el embarazo y que va desapareciendo poco a poco.

A lo largo de la primera semana de vida es normal que se produzca una descamación de la piel, debido a la permanencia del bebé en el líquido amniótico durante el embarazo.

El color de la piel del bebé suele ser rosado claro en la raza blanca. Incluso en razas de piel negra, los bebés presentan una piel más clara de lo que lo es la piel de sus progenitores.